Un espacio para acompañar a las familias en la comprensión de las formas únicas en que sus hijos e hijas perciben, sienten, aprenden y se relacionan con el mundo.

Desde una mirada neuroafirmativa, trabajamos para reconocer y valorar las diferencias individuales como parte natural de la diversidad humana. En las sesiones exploramos juntos las necesidades sensoriales, emocionales y cognitivas de cada niño o niña, ofreciendo estrategias que promuevan el bienestar, la autorregulación y la conexión familiar.

Más que “corregir conductas”, buscamos comprender qué hay detrás de ellas y construir entornos más amables, predecibles y ajustados a cada perfil.